cumpleaños

Y de pronto me aplastaron los años.

Miré en torno, incrédulo y buscando

donde depositar la carga, como si creyera

en la universidad de la condena.

Pero la verdad personal

me envolvió con la evidencia

de un alambre de púas.

No les deseo certezas de este tipo

sigan nomás comiendo que en nada hay gloria

mientras en algún lugar del esqueleto

palpo el hueso más cercano a su fin.

Joaquín O. Giannuzzi

de Cabeza final

4/ Inéditos


 

 

 

 

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