S.O.S. 1995

 

 

 

Dedícale un buen rato a tu rabia, dormilona.

No pierdas el tiempo con motines.

No la líes con ideas.

 

El Diablo no me dejará hablar,

tan sólo me dejará insinuar que eres una esclava,

tu infelicidad una política deliberada de aquellos en cuya servidumbre sufres,

y que tu desgracia sostiene.

 

Las atrocidades por allí,

la parálisis interior por aquí — ¿Contenta con este mejor pacto?

 

 

Te han apretado los tornillos.

Te están educando para el dolor.

 

 

El Diablo me ata la lengua.

 

Te estoy hablando a ti, «amiga de mi vida garabateada».

 

Has sido conquistada por aquellos que saben conquistar invisiblemente.

 

 

 

Las cortinas se mueven con tanta hermosura, cortinas con galones de alguna vieja y dulce intriga:

el Diablo me tienta para que deje de alarmarte.

Así que tengo que decirlo rápido:

 

Haya quien haya en tu vida, los que te hacen daño, los que te ayudan; los que conoces

y los que no conoces

— libéralos del anzuelo, deja que se escapen.

 

 

Reconoce el anzuelo

 

 

Estás escuchando Radio resistencia

 

 

 

 

 

 

 

S.O.S. 1995

 

 

 

 

Take a long time with your anger,

sleepyhead.

Don’t waste it in riots.

Don’t tangle it with ideas.

 

 

The Devil won’t let me speak,

will only let me hint

  that you are a slave,

   your misery a deliberate policy of those in whose thrall you suffer,

  and who are sustained by your misfortune.

 

The atrocities over there,

the interior paralysis over here –

Pleased with the better deal?

 

You are clamped down.

You are being bred for pain.

 

 

The Devil ties my tongue.

I’m speaking to you,

‘friend of my scribbled life.’

 

You have been conquered by those

who know how to conquer invisibly.

 

 

The curtains move so beautifully,

lace curtains of some sweet old intrigue:

the Devil tempting me

to turn away from alarming you.

So I must say it quickly:

Whoever is in your life,

those who harm you,

those who help you;

those whom you know

and those whom you do not know –

let them off the hook,

help them off the hook.

 

 

Recognize the hook

 

 

You are listening to Radio Resistance

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Leonard Cohen

 

 Libro del anhelo

 

Book of Longing

Leonard Cohen, 2006

Traducción: Alberto Manzano,

con la colaboración de Ivan Giesen, Birgit Reinke y Leonard Cohen

Ilustraciones: Leonard Cohen

 

 

Book of Longing

PENGUIN BOOKS

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3 Comentarios

  1. angel

    Ha quedado muy bonito…sí señor.

    Se hace más fácil leerlo y divertido.

    abrazo

    Ángel

    Responder
  2. caballo

    Aunque ya sabes que no estoy demasiado pendiente de las repeticiones,

    al contrario, creo que algunos poemas hay que colgarlos periódicamente,

    sin duda debo pedirte disculpas, con más motivo porque comentamos

    el efecto foto: qué afoto de leonardo colgaste, es impresionante.

    En fin, que lo bueno abunde y se repita.

    Gracias, un abrazo

    Narciso

    Responder
  3. caballo

    Por cierto, ya tenemos así un pequeño consejo editorial para aquellos poemas -y poetas- que lo

    permitan: disperse, extienda, esparza, expanda, estire, siembre, disemine, los versos e incluso

    las palabras del poema por todooooo el espacio libre del que disponga. No siga [siempre] las indicaciones

    que le enseñaron en la escuela: eran escasas y muchas de ellas mentirosas: algunos poemas piden

    extender sus brazos, abrir las costillas, soltarse la melena: hágales caso y suéltelos por todaaaaa la

    página. Son los llamados poemas silvestres [salvajes, libres, inconformes, caprichosos] que abundan

    más de lo que parece.

    Narciso

    Responder

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.

seis de corazones

 

Pero si lo piensas
con ese amor que sigue latiendo, cuando
el corazón deja de latir