La ciudad

Dijiste: Iré a otra tierra, iré a otro mar.

Otra ciudad ha de haber mejor que esta.

Cada esfuerzo mío es una condena dictada;

y mi corazón está —como un muerto— enterrado.

¿Hasta cuándo estará mi alma en este marasmo?

Adonde vuelva mis ojos, adonde quiera que mire

veo aquí las negras ruinas de mi vida,

donde pasé tantos años que arruiné y perdí.

No hallarás nuevas tierras, no hallarás otros mares.

La ciudad te seguirá. Vagarás por las mismas

calles. Y en los mismos barrios te harás viejo;

y entre las mismas paredes irás encaneciendo.

Siempre llegarás a esta ciudad. Para otra tierra —no lo esperes—

no tienes barco, no hay camino.

Como arruinaste aquí tu vida,

en este pequeño rincón, así

en toda la tierra la echaste a perder.

 

 

.

Constantino P. Cavafis

La ciudad, 1910

Poesía I: 1896-1918

en Poesía completa

Traducción del griego de Pedro Bádenas de la Peña

Alianza Editorial S. A. 1991


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.

seis de corazones

 

Pero si lo piensas
con ese amor que sigue latiendo, cuando
el corazón deja de latir