[ezcol_1half]       

sin nada que decir

Para naciones imprecisas como maleza,

para los nómadas que viven entre las rocas,

tribus de baja estatura y cara de enfado,

y para las familias unidas por adoquines

en pueblos con molinos de oscuras mañanas,

la vida es una muerte lenta.

Y también sus distintas maneras

de edificar, de bendecir,

de medir el amor y el dinero

son variantes de una muerte lenta.

El día que uno pasa cazando un cerdo

o celebrando una fiesta en el jardín,

horas que dan fe

o dan a luz, avanzan

hacia una muerte igualmente lenta.

Y decir eso para algunos

no significa nada; a otros les deja

sin nada que decir.

   [/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]   

Nothing to be said


For nations vague as weed,

For nomads among stones,

Small-statured cross-faced tribes

And cobble-close families

In mill-towns on dark mornings

Life is slow dying.

So are their separate ways

Of building, benediction,

Measuring love and money

Ways of slow dying.

The day spent hunting pig

Or holding a garden-party,

Hours giving evidence

Or birth, advance

On death equally slowly.

And saying so to some

Means nothing; others it leaves

Nothing to be said.

 [/ezcol_1half_end]

 

 

Philip Larkin

Sin nada que decir

Poesía Reunida

Las bodas de Pentecostés

The Complete Poems, Archie Burnett, ed.

Nueva York, Farrar, Strauss and Giroux, 2012

Versiones de Damián Alou y Marcelo Cohen

Lumen

 

 

 

 


 

 

 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.

seis de corazones

 

Pero si lo piensas
con ese amor que sigue latiendo, cuando
el corazón deja de latir