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víctor botas

 

las rosas de babilonia

1994

 

 

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ahora

 

 

 

Una mujer de ojos verdes irá en estos momentos

por Tottenham Court, hacia Oxford Street.

Otra, de negra cabellera, estará ahora mismo cruzando

la Vía dei Fori Imperiali, el Coliseo al fondo.

Una tercera, sale seguidamente de la boca

del metro de París, justo frente a l’Étoile.

En Madrid, habrá una jovencita que ligue emocionada

mientras toma una caña en algún bar de Rosales,

cerca del templo egipcio:

¿Y tú, my rose, my rose?:

a lo mejor

miras en este instante

el mar y no comprendes

que te lo llevas todo en las pupilas.

Mientras,

yo mato el tiempo tercamente

en este cuarto gris y ante esta hoja.

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