una dulce inmersión en la oscuridad de París
…en este blog sólo encontrarás lo que ya lleves puesto al entrar: no creemos en que vayas a ir más allá de las apariencias, pero tenemos que confiar en ello, y darte la oportunidad. La belleza no es fácil: es difícil: es uno de los sentidos de la verdad: la verdad de la forma. Es muy exigente y sólo se entrega, si acaso, a sus mejores amantes.
Si crees recibir la belleza espontáneamente, sin esforzarte, sin luchar por ella, no te engañes: habrás recibido cualquier cosa menos la belleza.
Tal vez si posees instinto, olfato, pasión, hambre por la belleza, tu paso por este blog no sea sólo turismo.
Eso deseamos y por ello compartimos nuestras maneras de buscar la belleza, allí donde esté.
una dulce inmersión en la oscuridad de París
Francis Bacon rehuyó siempre la interpretación de sus pinturas.
No es que no le gustara hablar sobre lo que hacía, sino que
rechazaba el aspecto representativo que casi toda explicación
conlleva. Nunca simpatizó con el arte abstracto.
le imploro al coatí que
perdone al hombre
os llamaba los pistoleros
o los cazarrecompensas
Éramos ahistóricos, presexuales;
estábamos suspendidos entre lo arcaico
y lo moderno
Sentada en el sofá comiendo tallarines.
Sentada en el sofá