Goldene Taschenuhr

 

 

 

 

Allá al fondo está la muerte, pero no tenga miedo.

Sujete el reloj con una mano, tome con dos dedos la llave de la cuerda,

remóntela suavemente. Ahora se abre otro plazo,

los árboles despliegan sus hojas, las barcas corren regatas,

el tiempo como un abanico se va llenando de sí mismo

y de él brotan el aire, las brisas de la tierra,

la sombra de una mujer, el perfume del pan.

¿Qué más quiere, qué más quiere?

Átelo pronto a su muñeca, déjelo latir en libertad, imítelo anhelante.

El miedo herrumbra las áncoras,

cada cosa que pudo alcanzarse y fue olvidada va corroyendo las venas del reloj,

gangrenando la fría sangre de sus rubíes.

Y allá en el fondo está la muerte si no corremos

y llegamos antes

y comprendemos que ya no importa.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Julio Cortázar

Instrucciones para dar cuerda al reloj


 

 

 

 

 

 

 

1 Comentario

  1. Mabel Bellante

    hay que adelantarse, hay que avivarse, hay que adelantarse, hay que despertarse, hay que adelantarse, hay que acordarse, hay que adelantarse

    Responder

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