Elogio de lo irreparable
Sé involuntaria. Sé febril. Olvida
sobre la cama hasta tu propio idioma.
No pidas. No preguntes. Arrebata y exige.
Elogio de lo irreparable
Sé involuntaria. Sé febril. Olvida
sobre la cama hasta tu propio idioma.
No pidas. No preguntes. Arrebata y exige.
muchacha sentada
La muchacha está seria y tiene algunas asimetrías,
mira de frente con dos ojos grandes y oscuros,
más bien separados. Su piel es casi del mismo color
que el fondo, sólo un poco más oscura, menos clara:
Unidad
Hay algo denso, unido, sentado en el fondo,
repitiendo su número, su señal idéntica.
Cómo se nota que las piedras han tocado el tiempo,
en su fina materia hay olor a edad,
cuando me pongo a imaginar mi muerte,
estaría acostada boca arriba, y mi espíritu
se iría desprendiendo de mi cuerpo
por la piel de la panza, como una hoja de papel manteca,
el reino del amor
‘Hermoso es el reino del amor, pero triste es también’
–dijo el poeta con un tópico. Y el fotógrafo
nos ha puesto una ventana fija en este rincón del
reino del amor que, en efecto, es hermoso y
también triste o, por lo menos, entrañable.
caballo alucinado
a Carlos Maita
Se ha vestido de negro como el último adiós
dado a los muertos.
Trotó desde el camino de las lechuzas
De criatura a criatura
Era ya casi demasiado tarde
para dar un paseo por el bosque,
pero fui igual. Y me salí un momento
del sendero sombrío
Roberto Plural
en exclusiva para Verseando, lee el mismo texto que
recitó tal día como hoy, pero hace ya 50 años, Trebor Pernath,
en el estadio de Maracaná
las tres gracias
Como es natural, lo que uno siente ante este cuadro es miedo,
temor, que ronda el pánico al mirar la cara de la gracia rubia,
la de la izquierda, que parece que solamente quiere morder.
al gato de la señora reynolds
¡Gato! que has pasado tu edad crítica,
¿Cuántas lauchas y ratas en tus días
Destruiste? ¿Cúantas golosinas robaste? Mira
Fijamente con esos brillantes lánguidos gajos
El cuerno del carnero
Me he vuelto hacia el paisaje porque los hombres me decepcionan:
el tronco de un árbol es orgulloso: cuando los leñadores lo derriban,
conserva una contenida, jónica solemnidad:
es un hecho rotundo que no necesita explicación.
la centáuride
Con el vestido caído como una carcasa, podemos ver
que Laetitia tiene dos mitades disímiles, como una
hermosísima centáuride: la mujer hembra blanca de piel
y dulce de mirada, clásica de altillos y de áticos, y la
Aprecio enormemente muchos de los poemas de ¨De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall¨,…
[…] “Al sol de Prestatyn” es un poema de Phillip Larkin donde se describe un cartel que encontramos al paso en una carretera.…
La alfabetización nos va a llevar a mundos que aún no son explorados para las personas que no exploran las…
Estos intelectualeeees... Ángel
Pues se agradece, Master, uno siempre echa en falta las buenas traducciones y, en especial, de estos monstruos de la…
Es una lástima que en este post tan bonito haya una traducción tan pobre... Para hacer justicia al poema y…
Propongo una explicación ( ) de este hermoso y potente texto, tanto para hacerle justicia como para hacer justicia a…
Magistral ndalfonso
Vamos, vamos, muchachos, que posiblemente ni siquiera habéis leído a Dante, ¿acaso pretendíais leer Miércoles de Ceniza de corrido, como…
Aprovecharé este poema para explicarme —a mí mismo sobre todo— algunos asuntos de la poesía y la poética que, estando…
Carlos para los poetas --y, en general, para los escritores-- introducirse en el mercado editorial es un auténtico drama, ya…
Me imaginaba los premios y el amaño detrás de cada uno, pero ahora confirmo mis sospechas. Qué desilusión. La verdad.…
Me parece un buen poema; antes, cuando entonces, hubiera dicho que necesito que un poema tenga imágenes concretas, imágenes reales,…
No quiero seguir hablando, gracias. NdAlfonso
Tiene usted razón (ya estará acostumbrado) .Pero yo en mi infinita ignorancia pensaba que hablábamos de muerte y religión, no…