[ezcol_1half]            

 

 

 

 

 

fabio morábito

 

delante de un prado

una vaca

 

ediciones era S.A. de C.V.
sistema nacional de creadores de arte
de Fonca-Conaculta
1ª edición 2011
México DF

 

 

 

[/ezcol_1half] [ezcol_1half_end]        

SI ALGO se pierde de improviso,

algo que necesito con apremio:

un lápiz, una hoja, la goma

de borrar,

sobrevuelo el desorden

con ojos de impotencia,

incapaz de hundir la mano en él.

Intento una última mirada

a ver si emerge por sí solo lo que busco.

Si hundiera algo de mí, lo sé,

tal vez con escarbar un poco…

pero en seguida me distraigo,

se cae el contexto, los ojos no obedecen.

Me asomo a la ventana para darle tiempo

a lo que busco de emerger,

ése es mi pobre método.

A veces sirve,

los ojos van al grano y todo cambia.

Habría que irse justo entonces,

en ese instante de discernimiento,

dejando todo como está, en desorden,

como en Asís el hombre aquel

al que no vieron nunca abrir un surco

porque veía criaturas por doquier.

Porque esto es ver: criaturas y no cosas.

¡Poder tener los ojos de aquel hombre!

Nada se perdería en los cajones,

tal vez no habría cajones,

que yo atiborro de importancia.

Más viudo cada vez de mis enseres,

más ciego cada vez ante mis útiles,

¿por qué no parto como él?, ¿qué me detiene

para volver al bosque, al pájaro y al lobo?

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

[/ezcol_1half_end]

 

 

 

 


 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.

seis de corazones

 

Pero si lo piensas
con ese amor que sigue latiendo, cuando
el corazón deja de latir