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rose colored glasses
Ten years, and it’s still on the
Radio. La Vie en rose
Spills out of a dozen windows
Onto the canal. A woman
And her son in a vegetable
Barge sing it. A man polishing
The prow of his gondola
Sings it while his dog wags its tail.
Children playing hopscotch sing it.
Grimy half washed clothes hang overhead.
Garbage floats in the narrow canal.
More radios join in. Across
The canal, beyond the iron windows
Of the Women’s Prison, a hundred
Pure voices of pickpockets
And prostitutes start to sing it.
It is just like being in church.
The next number is Ciao, ciao, bambina.
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anteojos de color rosa
Diez años, y todavía está en la
radio. La vie en rose
se derrama desde una docena de ventanas
en el canal. Una mujer
y su hijo en una barcaza
de verduras la cantan. Un hombre, limpiando
la proa de su góndola,
la canta mientras su perro mueve la cola.
Los chicos jugando a la rayuela la cantan.
Ropa a medio lavar cuelga sobre las cabezas.
Flota basura en el estrecho canal.
Más radios se suman. A través
del canal, detrás de las ventanas enrejadas
de la Cárcel de Mujeres, un centenar
de puras voces de carteristas
y prostitutas comienza a cantarla.
Es como estar en la iglesia.
El próximo número es Ciao, ciao, bambina.
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Versión de J. Aulicino
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