¡ande desnudo, en pelo, el millonario!
césarvallejocésarvallejovallejo
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¡Ande desnudo, en pelo, el millonario!
¡Desgracia al que edifica con tesoros su lecho de muerte!
¡Un mundo al que saluda;
un sillón al que siembra en el cielo; un sillón
llanto al que da término a lo que hace, guardando los comienzos;
ande el de las espuelas;
poco dure muralla en que no crezca otra muralla;
dese al mísero toda su miseria,
pan, al que ríe;
hagan perder los triunfos y morir los médicos;
haya leche en la sangre; leche en la sangre
añádase una vela al sol,
ochocientos al veinte;
pase la eternidad bajo los puentes! bajo los puentes!
¡Desdén al que viste,
corónense los pies de manos, quepan en su tamaño;
siéntese mi persona junto a mí!
¡Llorar al haber cabido en aquel vientre,
bendición al que mira aire en el aire,
muchos años de clavo al martillazo; años de clavo
desnúdese el desnudo,
vístase de pantalón la capa,
fulja el cobre a expensas de sus láminas,
majestad al que cae de la arcilla al universo, cae de la arcilla
lloren las bocas, giman las miradas, lloren las bocas
impídase al acero perdurar,
hilo a los horizontes portátiles, hilo a los horizontes portátiles,
doce ciudades al sendero de piedra,
una esfera al que juega con su sombra; una esfera
un día hecho de una hora, a los esposos;
una madre al arado en loor al suelo,
séllense con dos sellos a los líquidos,
pase lista el bocado,
sean los descendientes,
sea la codorniz, sea la codorniz
sea la carrera del álamo y del árbol;
venzan, al contrario del círculo, el mar a su hijo
y a la cana el lloro;
dejad los áspides, señores hombres, señores hombres
surcad la llama con los siete leños,
vivid,
elévese la altura,
baje el hondor más hondo,
conduzca la onda su impulsión andando,
tenga éxito la tregua de la bóveda!
¡Muramos;
lavad vuestro esqueleto cada día;
no me hagáis caso, no me hagáis caso
una ave coja al déspota y a su alma;
una mancha espantosa, al que va solo;
gorriones al astrónomo, al gorrión, al aviador!
¡Lloved, solead,
vigilad a Júpiter, al ladrón de ídolos de oro, vigilad a Júpiter
copiad vuestra letra en tres cuadernos,
aprended de los cónyuges cuando hablan, y
de los solitarios, cuando callan;
dad de comer a los novios,
dad de beber al diablo en vuestras manos,
luchad por la justicia con la nuca, con la nuca
igualaos,
cúmplase el roble, cúmplase el roble
cúmplase el leopardo entre dos robles, cúmplase el leopardo entre dos robles
seamos,
estemos,
sentid cómo navega el agua en los océanos,
alimentaos,
concíbase el error, puesto que lloro,
acéptese, en tanto suban por el risco, las cabras y sus crías;
desacostumbrad a Dios a ser un hombre, a ser un hombre
creced… !
Me llaman. Vuelvo. Vuelvo
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