opinión: qué poesía hay que escribir [1ª entrega]

se trata de un asunto de difícil exposición, aunque no sé bien cuáles son

sus dificultades, lo que, sin duda, complica más la cosa.

al parecer, la poesía necesita generarse en un futuro no desfuturizable,

que es, posiblemente, la noción que complica averiguar qué poesía

hay que escribir.

el futuro en sentido propio no puede ser un tiempo que se desfuturice

y, por tanto, que pueda alcanzarse. Sin embargo, no estamos tratando

de un asunto de ciencia ficción, sino más bien de física: las propuestas

más asombrosas acerca del tiempo son las de Einstein, que fue un físico.

se puede plantear de otra manera para que así podamos disponer de

otras perspectivas que nos permitan hacer que el tema sea más accesible.

Hay cuestiones que, al parecer, sólo admiten una respuesta suficiente

si tal respuesta proviene del futuro; ahora bien, ¿es necesario aguardar

a que ese futuro llegue, se haga presente, para que podamos conocer

esa respuesta futura? En este artículo entendemos y defendemos, desde

luego, que no.

Sin embargo, es preciso que acotemos de alguna manera ese futuro

no desfuturizable en sus ámbitos de aplicación: no defendemos que

todo el futuro pueda adivinarse, por decirlo así. Sobre todo porque no

hablamos de adivinación. Es más, aunque pudiésemos disponer de

una respuesta que estuviera en el futuro, no por ello habríamos desfuturizado

el futuro de esa respuesta.

Ahora, aquí, nos interesa el futuro no desfuturizable como una propuesta

sobre la poesía que hay que escribir, nada más.

Y puede plantearse al revés, a saber: los poetas que han escrito poemas y

poesía que podemos llamar verdaderos, ¿no han procedido en cierta medida

a conseguirlos de un futuro impredecible, o a generarlos en un futuro

insospechable?

Tal vez con este planteamiento invertido el asunto parezca más posible,

menos descabellado o extravagante.

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