¿Con trenzas o sin trenzas?

Me dijeron que era un tipo formal aunque fuera dentista

y yo tenía una muela de colores que me estaba matando.

Era lento y parecía tonto, me preguntó si era del Osasuna.

No era esa, le dije, sino la de delante, la que lleva trenzas.

Como tenía que hacer algo, hizo algo, aunque no fuera

exactamente lo que tenía que hacer. Tampoco era esa, dije.

Pues lleva trenzas, dijo. Se están haciendo trenzas unas

a otras para engañarnos, dije. Vamos a hacer las cosas bien,

dijo. Llenó la bandeja de trencitas monísimas, agrupadas

por los colores de los lacitos. Se frotaba las manos como

un vencedor. Tampoco era esa, dije, sino la de detrás.

Pues no lleva trenzas. Se están deshaciendo las trenzas

unas a otras para engañarnos, dijo. Vamos a hacer las cosas

bien, dije. ¿Las prefiere con trenzas o sin trenzas?, dijo.

¿Cómo están más guapas?, le pregunté. Depende, respondió.

Entonces sin trenzas, dije. Ya se han hecho las trenzas

unas a otras para engañarnos, dijo. Entonces con trenzas, dije.

Ya se han desecho las trenzas unas a otras para engañarnos,

dijo. Era un tipo formal aunque fuera dentista, como me dijeron.


 

 

 

 

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