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Identité des images


Je me bats avec fureur contre des animaux et des bouteilles

Depuis peu de temps peut-être dix heures sont

passées l’une après l’autre

La belle nageuse qui avait peur du corail ce matin s’éveille

Le corail couronné de houx frappe à sa porte

Ah! encore le charbon toujours le charbon

Je t’en conjure charbon génie tutélaire du rêve et da ma

solitude laisse-moi laisse-moi parler encore de la

belle nageuse qui avait peur du corail

Ne tyrannise plus ce séduisant sujet de mes rêves

La belle nageuse reposait dans un lit de dentelles et d’oiseaux

Les vêtements sur une chaise au pied du lit étaient

illuminés par les lueurs les dernières lueurs du charbon

Celui-ci venu des profondeurs du ciel de la terre et

de la mer était fier de son bec de corail et de ses

grandes ailes de crêpe

Il avait toute la nuit suivi des enterrements

divergents vers des cimetières suburbains

Il avait assisté à des bals dans les ambassades

marqué de son empreinte une feuille de fougère

des robes de satin blanc

It s’était dressé terrible à l’avant des navires et les

navires n’étaient pas revenus

Maintenant tapi dans la cheminée il guettait le

réveil de l’écume et le chant des bouilloires

Son pas retentissant avait troublé le silence des

nuits dans les rues aux pavés sonores

Charbon sonore charbon maître du rêve charbon

Ah dis-moi où est-elle cette belle nageuse cette

nageuse qui avait peur du corail?

Mais la nageuse elle-même s’est rendormie

Et je reste face à face avec le feu et je resterai

la nuit durant à interroger le charbon aux ailes

de ténèbres qui persiste à projeter sur mon

chemin monotone l’ombre de ses fumées et le

reflet terrible de ses braises

Charbon sonore charbon impitoyable charbon.

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Identidad de las imágenes


Lucho furiosamente contra animales y botellas

Desde hace poco tiempo quizá diez horas una después de otra

La hermosa nadadora que tenía miedo del coral esta mañana se despierta

El coral coronado de acebo llama a su puerta

¡Ah! otra vez el carbón siempre el carbón

Te conjuro carbón genio tutelar del sueño y de mi

soledad déjame déjame seguir hablando de la

hermosa nadadora que tenía miedo del coral

No dictamines más sobre este tema seductor de mis sueños

La hermosa nadadora descansaba en un lecho de encajes y de pájaros

Los vestidos sobre una silla al pie del lecho iluminados por los fulgores

los últimos fulgores del carbón

Llegado éste de las profundidades del cielo de la tierra

y del mar estaba orgulloso de su pico de coral y de sus

grandes alas de crespón

Durante toda la noche él había seguido divergentes

entierros hacia cementerios suburbanos

Había asistido a bailes en las embajadas

y dejado su rastro en una hoja de helecho

de los vestidos de raso blanco

Se había erguido terrible en la proa de los navíos

y los navíos no habían vuelto

Ahora agazapado en la chimenea acechaba el despertar

de la espuma y el canto de las marmitas

Su paso resonante había turbado el silencio de las noches

en las calles de adoquines sonoros

Carbón sonoro carbón amo del sueño carbón

Ah dime ¿dónde está la hermosa nadadora que

tenía miedo del coral?

Pero precisamente la nadadora se ha vuelto a dormir

Y me quedo frente a frente con el fuego y me quedaré

toda la noche para interrogar al carbón con alas

de tiniebla que insiste en proyectar sobre mi

camino monótono la sombra de su humareda y el

reflejo terrible de sus brasas

Carbón sonoro carbón despiadado carbón.

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Robert Desnos

Versión de Aldo Pellegrini

Breve antología poética

Ediciones alma_perro, 2011

livretdesnos


 

 

 

 

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