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La fuerza que por el verde tallo impulsa la flor

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La fuerza que por el verde tallo impulsa la flor

Impulsa mi verde edad; la que hace estallar las raíces de los árboles

Es mi destructora.

Y yo estoy mudo para decirle a la encorvada rosa

Que mi juventud está doblegada por la misma fiebre invernal.

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La fuerza que empuja el agua a través de las rocas

Impulsa mi roja sangre; la que exprime las bocas de los arroyos

Convierte la mía en cera.

Y yo estoy mudo para decirles a mis venas

Que en el manantial de la montaña mama la misma boca.

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La mano que agita el agua del charco

Revuelve las arenas movedizas; la que ata las ráfagas del viento

Tira de la vela de mi mortaja.

Y yo estoy mudo para decirle al ahorcado

Que la cal del verdugo está hecha con mi barro.

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Los labios del tiempo chupan de lo más alto del manantial;

El amor gotea y se acumula, pero sólo la sangre caída

Podrá aliviar sus heridas.

Y yo estoy mudo para decirle al viento cósmico

que el tiempo ha marcado un cielo alrededor de las estrellas.

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Y yo estoy mudo para decirle a la tumba de la amada

Que en mi sábana anda encorvado el mismo gusano.

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The force that through the green fuse drives the flower

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The force that through the green fuse drives the flower

Drives my green age; that blasts the roots of trees

Is my destroyer.

And I am dumb to tell the crooked rose

My youth is bent by the same wintry fever.

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The force that drives the water through the rocks

Drives my red blood; that dries the mouthing streams

Turns mine to wax.

And I am dumb to mouth unto my veins

How at the mountain spring the same mouth sucks.

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The hand that whirls the water in the pool

Stirs the quicksand; that ropes the blowing wind

Hauls my shroud sail.

And I am dumb to tell the hanging man

How of my clay is made the hangman’s lime.

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The lips of time leech to the fountain head;

Love drips and gathers, but the fallen blood

Shall calm her sores.

And I am dumb to tell a weather’s wind

How time has ticked a heaven round the stars.

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And I am dumb to tell the lover’s tomb

How at my sheet goes the same crooked worm.

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Dylan Thomas

Written in 1933 (when Thomas was nineteen),

it was first published in his 1934 collection 18 Poems

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