Recuerdo a Ángeles, unos ochenta.
La conocí un verano. Con solo unas palabras
atrajo mi atención como a un colibrí.
Escribía poesía y cuando le pregunté
qué poetas le gustaban más me dijo
que no leía a ninguno para no contagiarse.
Ángeles era todo corazón, pues ya se sabe
que el intelecto repite, pero el corazón descubre.

 

 

 

 

 

 

 

 

__________

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.