LXVI

Dobla el dos de Noviembre.

Estas sillas son buenas acogidas.

La rama del presentimiento

va, viene, sube, ondea sudorosa,

fatigada en esta sala.

Dobla triste el dos de Noviembre.

Difuntos, qué bajo cortan vuestros dientes

abolidos, repasando ciegos nervios,

sin recordar la dura fibra

que cantores obreros redondos remiendan

con cáñamo inacabable, de innumerables nudos

latientes de encrucijada.

Vosotros, difuntos, de las nítidas rodillas

puras a fuerza de entregaros,

cómo aserráis el otro corazón

con vuestras blancas coronas, ralas

de cordialidad. Sí. Vosotros, difuntos.

Dobla triste el dos de Noviembre.

Y la rama del presentimiento

se la muerde un carro que simplemente

rueda por la calle.

César Vallejo

de Trilce

Obra poética completa preparada

por Georgette de Vallejo (Lima, Francisco

Moncloa Editores, 1968)

Lima 2009


 

 

 

 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.

seis de corazones

 

Pero si lo piensas
con ese amor que sigue latiendo, cuando
el corazón deja de latir