fabio morábito

 

querida emily

 

 

 

QUERIDA Emily,

tu vida más pequeña que un pañuelo,

tu jardín, los dos lirios en la mano

con que abrías la puerta.

 

El reverendo, el juez,

la aldea de prados verdes

con su tedio,

y tu padre, la más dura de las puertas.

 

Sedienta de más vida y temerosa

de tenerla, ambigua siempre,

bajando la escalera cuando las visitas

habían tomado ya el camino de la puerta.

 

Sólo en tus versos, Emily,

bajaste a tiempo todos los peldaños

y no necesitaste flores para ir a abrir

la puerta.

 

Ni lirios, ni prados,

ni reverendos ni jueces;

tú sola, en la miseria

de ese jardín humano, abriendo puertas.

 

 

 

 

 

_______________________

Fabio Morábito

Delante de un prado una vaca

Ediciones Era, S.A. de C.V.

________________________

 

 

 

 

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