tragedia de los caballos locos

 

jaime siles

 

 

a Marc Granell

 

 

Dentro de los oídos,

ametralladamente,

escucho los tendidos galopes de caballos,

de almifores perdidos

en la noche.

Levantan polvo y viento,

al galopear el suelo

sus patas encendidas,

al herir el aire

sus crines despeinadas,

al tender como sábanas

sus alientos de fuego.

Lejanos, muy lejanos,

ni la muerte los cubre,

desesperan de furia

hundiéndose en el mar

y atravesándolo como delfines vulnerados de tristeza.

Van manchados de espuma

con sudores de sal enamorada,

ganando las distancias

y llegan a otra playa

y al punto ya la dejan,

luego de revolcarse, gimientes,

después de desnudarse las espumas

y vestirse con arena.

De pronto se detienen. Otra pasión los cerca.

el paso es sosegado

y no obstante inquieto,

los ojos coruscantes, previniendo emboscadas.

El líquido sudor que los cubría

se ha vuelto de repente escarcha gélida.

Arpegian sus cascos al frenar

el suelo que a su pie se desintegra.

Ahora han encontrado de siempre, sí, esperándoles

las yeguas que los miran.

Ya no existe más furia, ni llama que el amor, la dicha de la

sangre,

las burbujas amorosas que resoplan

al tiempo que montan a las hembras.

Y es entonces el trepidar de pífanos, el ruido de cornamusas,

el musical estrépito

que anuncia de la muerte la llegada.

Todos callan. Los dientes se golpean quedándose

soldados.

Oscurece. La muerte los empaña, ellos se entregan

y súbito, como en una caracola fenecida, en los oídos escucho

un desplomarse patas rabiosas, una nube de polvo levantado

por crines,

un cataclismo de huesos que la noche se encarga

de enviar hacia el olvido.

 

 

 

 

___________________________

Jaime Siles

en Canon, 1973

Antología consultada de la poesía

española

1968-1998

Colección Visor de Poesía

_________________________

 

 

 

 

7 Comentarios

  1. Vlad

    Los caballos siempre añaden belleza a todo lo que tocan. Incluso al ciclo de la vida. Poema bello. Aunque me sobren algunas frases no dejaré que los árboles me impidan ver el bosque. Gracias.

    Responder
  2. angel

    Vaya poema más bonito…me he quedado embobado a medida,
    que avanzaba la lectura…

    Thanks very much

    Ángel

    Responder
  3. angel

    Yo creo que me ha despistado la historia de los caballos,
    me he metido tan dentro que no he podido distinguir bien el poema.

    Después de lo que ha dicho Vlad, sí es verdad que le sobran frases.
    Le falta vertiginosidad al poema.

    Ángel

    Responder
  4. NdAlfonso

    Me disculpo por mis comentarios, que he borrado por ofensivos.

    Pero creo que debes disculparte o algo similar- por tu comentario,
    que no me parece justificado a pesar de lo ofensivo que
    pudiese haber en los míos.

    N

    Responder
  5. NdAlfonso

    Añado: hay bastante curro en este blog
    como para perder el tiempo en cosas así.

    En definitiva, todavía sabemos muy poco de poesía,
    y sólo aprenderemos leyendo buenos poemas nuevos
    y releyendo los consagrados. Pero eso exige colgarlos
    para compartirlos. Y buscarlos antes. Y si están en idioma
    extranjero, buscar una traducción suficiente.

    Se trata de media hora larga, en el mejor de los casos,
    para una entrada de un autor no español.
    Lo que explicito para recordar que se trata de un trabajo,
    aunque pueda gustarnos e incluso apasionarnos.

    N

    Responder
  6. Vlad

    Por mi parte me disculpo igualmente por mi comentario a tus comentarios, que no a tu persona. Gracias

    Responder
  7. NdAlfonso

    Comentario borrado a petición de la persona que lo ha emitido.

    Asunto concluido.

    N

    Responder

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