–
karina
–
Karina es feliz o está feliz o se siente feliz o solamente contenta o solamente sonriente, con una sonrisa
puesta para la ocasión, social, amable, comercial. Está preparada para ir a comprar lo que sea necesario: para eso
tiene un esqueleto de huesos que la hacen muy dura por dentro, y tiene unos músculos que tiran del esqueleto, y
lo que vemos de Karina es la piel, exterior, que es una fina suavidad universal y unánime, y vemos también su pelo,
su cara, sus largas extremidades .
Ahora está puesta de frente y sin bastón, con una simpatía demostrativa, espolvoreando su persona sobre
nuestra alma, tal vez queriendo congraciarse como mujer mundial, interhumana, parroquial y pública –en el sentido
legal de la palabra-.
La vemos fresca, sana, educada y amable, y eso nos tranquiliza, nos da confianza que sea brazuda y
mamífera, que vaya cuidadosamente peinada y lleve pendientes y calcetines. Estamos, en fin, satisfechos, ‘considerando
que ella sabe que la queremos, que la odiamos con afecto y que nos es, en suma, indiferente’ –como dijo el poeta.
0 comentarios