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I
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pintura húmeda
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Esos hermosos días

en que la ciudad parece un dado, un abanico y un canto de

[pájaro

o la concha de un molusco en la orilla

– adiós, adiós, bellas muchachas,

nos hemos visto hoy

y nunca más nos volveremos a ver.

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Los hermosos domingos

en que la ciudad parece fútbol, una tarjeta y una ocarina

o una alegre campana

– en la calle soleada

las sombras de los que pasan se besan

y la gente se aleja, totalmente extranjera.

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Esas hermosas tardes

en que la ciudad parece una rosa, un ajedrez, un violín

o una muchacha que llora

-jugábamos al dominó,

dominó de puntos negros con las delgadas chicas de la

barra,

mirándoles las rodillas,

que estaban demacradas

como dos calaveras con la corona de seda de sus ligas

en el reino desesperado del amor.
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Jaroslav Seifert

traducido al inglés por Ewald Osers

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Wet picture

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Those beautiful days

when the city resembles a die, a fan and a bird song I or a scallop

shell on the seashore

-goodbye, goodbye, pretty girls,

we met today

and will not ever

meet again.
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The beautiful Sundays

when the city resembles a football, a card and an

ocarina I or a swinging bell

– in the sunny street

the shadows of passers-by were kissing

and people walked away, total strangers.

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Those beautiful evenings

when the city

resembles a rose, a chessboard, a violin I or a crying girl

-we played dominoes,

blackdotted

dominoes with thin girls in the bar,

watching their knees,

which were emaciated

like two skulls with the silk crowns o f their garters

in the desperate kingdom of love.

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Jaroslav Seifert

translated by Ewald Osers.

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Este poema está recogido como

I. Pintura húmeda

al inicio de Un nuevo sendero a la cascada

de Raymond Carver

en Todos nosotros

Poesía reunida

S. L. Bartleby Editores

2006, 3ª edición

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