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Colegio en la esquina de la calle

El año próximo la hierba de la tumba nos cubrirá.

Ahora estamos de pie y reímos;

mirando pasar a las muchachas,

apostando a los caballos perdedores,

bebiendo ginebra barata.

No tenemos nada que hacer,

ningún lugar adonde ir: nadie.

El año pasado fue hace un año; nada más.

Entonces no éramos más jóvenes; ni ahora más viejos.

Nos las arreglamos para tener la apariencia de los jóvenes:

no sentimos nada detrás de nuestros rostros,

ni en un sentido ni en otro.

Probablemente no estaremos completamente muertos

cuando muramos.

Durante todo el camino no fuimos nada,

ni siquiera soldados.

Somos los insultados, hermano, los muchachos desolados:

sonámbulos en una tierra oscura y terrible,

donde la soledad es un cuchillo sucio en nuestra garganta.

Frías estrellas nos observan, camarada.

Frías estrellas y las prostitutas.

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Street Corner College

Next year the grave grass will cover us.

We stand now, and laugh;

Watching the girls go by;

Betting on slow horses; drinking cheap gin.

We have nothing to do; nowhere to go; nobody.

Last year was a year ago; nothing more.

We weren’t younger then; nor older now.

We manage to have the look that young men have;

We feel nothing behind our faces, one way or other.

We shall probably not be quite dead when we die.

We were never anything all the way; not even soldiers.

We are the insulted, brother, the desolate boys.

Sleepwalkers in a dark and terrible land,

Where solitude is a dirty knife at our throats.

Cold stars watch us chum

Cold stars and the whores.

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Kenneth Patchen

Street Corner College

The American Mercury,

April 1939, p. 491


 

 

 

 

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