vicente aleixandre

 

la destrucción o el amor

 

después de la muerte

 

 

 

 

[1932 -1933] 1935

 

poesía completa

edición de alejandro sanz

lumen

penguin random house

grupo editorial

españa

 

 

 

      I

 

 

después de la muerte

 

 

 

La realidad que vive

en el fondo de un beso dormido

donde las mariposas no se atreven a volar.

 

Esa transparencia

donde respirar no es mover el pecho en el vacío

mientras la cara se dobla como la flor.

 

La realidad

bate unas alas inmensas

que no impiden el vaivén de las flores

ni el transcurso de los pájaros.

 

 

 

El mar entero,

encerrado en un cuarto,

asoma unas largas lenguas por una ventana

donde las espumas furiosas amontonan sus rostros

pegados contra el vidrio.

 

 

La realidad que vivo,

la transparencia en que nunca llamaré al aire

unas manos,

en que nunca llamaré besos a los montes.

La realidad donde el rayo es la voz que me llama.

 

La realidad que vivo,

transparencia en la que el sonido

de un ángel o de ese sollozo de la carne,

llega como lluvia lavada,

como esa planta siempre verde,

como tierra fresca y olorosa.

 

 

Todo pasa.

La realidad transcurre

como un pájaro.

Me lleva entre sus alas.

Me arrebata a la sombra, a la luz, al divino contagio.

Me hace pluma

que ignora el mar:

esas aguas espesas que como labios negros

ya borran lo distinto.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

eternidad

 

La vida vibrante entrando a borbotones; barriendo toda duda.

seis de corazones

 

Pero si lo piensas
con ese amor que sigue latiendo, cuando
el corazón deja de latir