álbum

NO HAY NADIE EN MI FAMILIA QUE HAYA MUERTO DE AMOR.

 Lo que pasó, pasó, pero nada de mitos.

 ¿Romeos tuberculosos? ¿Julietas con difteria?

 Algunos, por el contrario, llegaron a la decrepitud.

 ¡Ninguna víctima por falta de respuesta

 a una carta salpicada de lágrimas!

 Siempre al final llegaba algún vecino

 con espejuelos y rosas.

 ¡Y nadie se asfixió en un elegante armario

 al volver de pronto el marido de la amante!

 A nadie esos cordeles, mantillas y volantes

 le impidieron salir en la fotografía.

 ¡Nadie con el infernal espíritu del Bosco!

 ¡Y nadie con su pistola al jardín!

 (Con una bala en el cráneo, pero por otros motivos,

 murieron en alguna camilla.)

 incluso aquella del extático moño

 y de ojos herrados como después de un baile,

 zarpó en una gran hemorragia

 no hacia ti, bailarín, y no por melancolía.

 Quizá alguien antes del daguerrotipo,

 pero de estos del álbum, nadie que yo sepa.

 Pasaban las tristezas, y los días uno tras otro,

 y ellos, consolados, desaparecían de gripa.

Wislawa Szymborska

Poesía no completa

Mil alegrías -Un encanto- 1967

Edición y traducción de

Gerardo Beltrán, Abel A. Murcia

2ª edición

FCE, México, 2008


 

 

 

 

 

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