Serás puro:

tres vestidos,

una escudilla para recoger la limosna.

Serás bueno:

la mejilla,

luego la otra mejilla para que te abofeteen.

Serás fuerte:

tu vida,

luego la otra vida en la que te transformarás en dios.

Serás humilde como un guijarro,

como un pichón que sale del huevo.

Serás lo que debes ser

para alguna verdad,

para algún amor,

para algún orden invisible.

Y serás recompensado,

bestia de carga y de ensueños.

Y serás castigado,

animal cargado de piedras

y de nada.

Nunca serás tú mismo.

 

 

 

 

 

 

alain bosquet

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Alain Bosquet

futuro


 

 

 

 

 

 

 

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