Raro oficio gratuito                Ir perdiendo el pelo

y los dientes           Las antiguas maneras de ser educado

Extraña complacencia          (El poeta no desea ser más

que los otros)            Ni riqueza ni fama ni tan sólo

poesía            Tal vez ésta sea la única forma

de no tener miedo           Instalarse en el miedo

como quien vive dentro de la lentitud

Fantasmas que todos poseemos         Simplemente

aguardando a alguien o algo sobre las ruinas

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Roberto Bolaño


 

 

 

 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

las tardes – Vicente Gallego

 

Pero los días, al pasar, no son
el generoso rey que cumple su palabra,
sino el ladrón taimado que nos miente.

 

exilio

 

Miraba la vida desde la ventana
de mis ojos,