pequeño y triste petirrojo

Oscar Wilde llevaba

una gardenia en el pico.

Color gris, color malva en las piedras y el rostro,

más azul pedernal en los ojos, más hiedra

en las uñas patricias, ebonita en las ingles de los faunos.

No salgáis al jardín: llueve, y las patas

de los leones arañan la tela metálica del zoo.

Isabel murió, y estaba pálida,

una noche como ésta.

Hay orden de llorar sobre el bramido estéril de los acantilados.

Un violín dormirá? Unas camelias?

Y aquel pijama rosa en pie bajo la lluvia.

Pere Gimferrer

Antología poética

Ediciones alma_perro


 

 

 

 

 

 

 

 

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