.

La miel

.

Canto trigésimo segundo

.

Hará unos veinte días puse una rosa en un vaso

encima de la mesita que hay junto a la ventana.

Cuando me di cuenta de que todas las hojas

se habían marchitado y estaban a punto de caer,

me senté frente al vaso

a ver morir la rosa.

Estuve un día y una noche esperando.

El primer pétalo cayó a las nueve de la mañana

y lo hizo en mis manos.

Nunca he estado junto a un lecho de muerte,

ni siquiera cuando murió mi madre.

Yo estaba de pie, lejos, al final de la calle.

Tonino Guerra

.
De La miel, 1981

Traducción de Juan Vicente Piqueras

 

 

.


 

 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

quiéreme

 

como si el amor fuera nuestro