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Funeral blues

Stop all the clocks, cut off the telephone.

Prevent the dog from barking with a juicy bone,

Silence the pianos and with muffled drum

Bring out the coffin, let the mourners come.

Let aeroplanes circle moaning overhead

Scribbling in the sky the message He is Dead,

Put crêpe bows round the white necks of the public doves,

Let the traffic policemen wear black cotton gloves.

He was my North, my South, my East and West,

My working week and my Sunday rest

My noon, my midnight, my talk, my song;

I thought that love would last forever, I was wrong.

The stars are not wanted now; put out every one,

Pack up the moon and dismantle the sun.

Pour away the ocean and sweep up the wood;

For nothing now can ever come to any good.

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Funeral blues

Que se paren los relojes, que se que corte el teléfono,

que el perro a un hueso jugoso ya no le ladre,

que se callen los pianos y con redobles en sordina

venga el ataud y entren los dolientes.

Que los aeroplanos que gimiendo dan vueltas en lo alto

escriban en el cielo el mensaje: «Él ha muerto»,

que pongan pajaritas de papel en los cuellos blancos de las palomas,

que los policias se pongan guantes negros.

Era mi norte, mi sur, mi este y mi oeste,

toda mi semana y mi día de descanso,

mi mediodía, mi medianoche, mi plática, mi canción.

Pensé, y estaba equivocado, que nuestro amor duraría siempre.

Ya no quiero las estrellas. Que las apaguen,

que empaquen la luna y desmantelen el sol.

Que sequen el océano y barran los bosques

porque ya nada de lo que venga habrá de ser bueno.

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W H Auden

Funeral blues

Canción de cuna: antología poética

Lumen

Barcelona 2006

 

 

 

 


 

 

 

 

 

 

 

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