toshio nakae

 

versión de masashi yano y aurelio asiain

 

 

 

canción de amor

 

 

 

Qué ganas de comerme a esta mujer.
Toda entera quisiera devorarla.
Sin azúcar ni sal,
sin cocinar,
cruda y viva quisiera devorarla.

 

Qué ganas de cortarle la cabeza,
arrancarle los brazos y las piernas,
desprenderle los pechos,
dejarla sin cabello,
guardarlo para mí.

 

Qué ganas de tragarme su canción,
devorar sus trigales,
sus árboles,
sus flores amarillas.
Quisiera devorar la primavera.

 

Qué ganas de matar al hombre de esta mujer.
Y a los peces que nadan en su vientre, los bichos
que se arrastran, las serpientes que reptan,
los ociosos rinocerontes,
qué ganas de ahuyentarlos
para salvarla
y convocar al sol de su interior.

 

Qué ganas de sorberle el alma a esta mujer.
De atrapar esa nube.
De capturar el cielo.
De quedarme su luna.
De robarme esa estrella.

 

Quisiera estar con ella
y protegerla
y comerme a su padre, su madre, sus hermanos,
y a ese dios al que nunca podría devorar.

 

 

 

 

 

 

 

 

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