La casa

Casa de los hombres.

Señalaré un círculo alrededor de las casas,

vigilaré día y noche los árboles frutales.

Grandes áreas de tierra,

posesiones del tamaño de una hormiga.

Velaré todas estas cosas.


Al anochecer

espantaré las cornejas que dañan el trigo,

ampararé el descanso nervioso de las gallinas,

acercaré mi oído al aliento

de las vacas

 

 

 


Luisa Castro


La casa

En Los Hábitos del Artillero, 1990

Revista oral de poesía

Poesía en el campus

número 22


 

 

 

 

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Te puede interesar

la no vida

 

sin espacio para la expresión
del dolor, —como hacen los artistas.

 

es posible

 

Es fácil y probable,
que al pasar los años, se desconozcan

 

belleza

 

Era tan guapa
que no llamaba
la atención