detesto de todo corazón casi todo lo que me rodea
Detesto de todo corazón
Son tantas las cosas que detesto de todo corazón,
hijo mío querido, tantas las cosas
que aborrezco de todo corazón,
que me sería muy difícil poder enumerártelas.
han venido otra vez como líquenes inevitables
El óxido se posó en mi lengua
como el sabor de una desaparición.
El olvido entró en mi lengua y
no tuve otra conducta que el olvido,
y no acepté otro valor que la imposibilidad.
como no voy a mirar, si arde como el rastrojo en cuanto me descuido
duerme conmigo
Todavía estoy mal cosido
ay házmelo despacito tu
no te rías, que es verdad
que no me lo ha hecho nadie
que duermo solito
envuelta en celofán, bien razonada
Desnatada
Estoy al borde de ser borde,
me lo noto.
El precipicio crece
estoy cansada.
y por oírte orinar, en la oscuridad
Tango del viudo
Oh Maligna, ya habrás hallado la carta, ya habrás llorado de furia,
y habrás insultado el recuerdo de mi madre
llamándola perra podrida y madre de perros,
‘esto es poesía, mamá’
tan sólo una mujer normal respirando
La muerte de Marilyn Monroe
Palparon los de la ambulancia el cuerpo,
frío, lo subieron, pesado como el hierro,
a la camilla, le intentaron cerrar
la boca, le cerraron los ojos, ataron
flecos de alfalfa bailaban entre haces de luz
Pasto para los caballos
Había conducido la mitad de la noche
desde el sur de San Joaquín
a través de Mariposa, surcando
las carreteras de la Montaña Peligrosa,
