Versos gnómicos
Cuando el asado humeaba en el horno escupiendo negrura,
me sentí desconcertado y no supe qué hacer,
pero cuando estaba sumergido en la contemplación
Versos gnómicos
Cuando el asado humeaba en el horno escupiendo negrura,
me sentí desconcertado y no supe qué hacer,
pero cuando estaba sumergido en la contemplación
Ione, muerta hace un año
Vacíos están los caminos
Vacíos están los caminos de esta tierra
Y las flores
Inclinan sus pesadas cabezas.
Varios no
En la primavera o principio del verano de 1912, «H. D.», Richard Aldington y yo
resolvimos que estábamos de acuerdo sobre los tres principios siguientes:
1. Tratamiento directo de la «cosa». Ya sea subjetiva u objetiva.
Dum capitolium scandet
Muchos vendrán detrás de mí
cantando tan bien como yo, ninguno mejor;
revelarán el corazón de su verdad
como yo les he enseñado a revelarlo;
Canto III
Me senté en los escalones de la Dogana
porque las góndolas estaban caras, ese año,
y no había de “esas chicas”, sólo había una cara,
y el Buccentoro a unos veinte metros, gritando “Stretti”,
La esposa del mercader del río: una carta
Mientras aún tenía mi pelo cortado recto sobre mi frente
Jugaba junto al portal, cogiendo flores.
Tú venías en zancos de bambú, jugando al caballo,
Tú pasabas junto a mi asiento, jugando con ciruelas azules.
Constantemente repito que se necesitaron
dos siglos de Provenza y uno de Toscana
para desarrollar los instrumentos que
utilizó Dante en su obra maestra, y que
fueron necesarios los latinistas del
Renacimiento y la Pléyade, además del
El árbol
Me detuve y fui un árbol en medio del bosque,
conocí la verdad de cosas jamás vistas;
de Dafne y la rama de laurel
y esa vieja pareja que festejaba a los dioses
blandula tenula vagula
¿Qué tienes tú que ver, oh mi alma, con el paraíso?
¿Acaso no querrías, cuando ya estemos libres,
buscar un lugar claro, donde el sol
derrame sobre nosotros, a través de las hojas del olivo
Instrucciones adicionales
Venid, cantos míos, permitámonos expresar nuestras más bajas pasiones,
Permitámonos expresar nuestra envidia por el hombre con trabajo fijo
y sin preocupación por el futuro.
Sois muy holgazanes, cantos míos,
La Isla del Lago
Oh Dios, Oh Venus, Oh Mercurio, patrón de los ladrones,
dadme a su debido tiempo, os lo suplico, un pequeño
estanco,
con las cajetillas relucientes
apiladas con esmero en los estantes
y el suelto y fragante cavendish
y el tabaco para liar,
Extraordinario poema
Aprecio enormemente muchos de los poemas de ¨De una niña de provincias que se vino a vivir en un Chagall¨,…
[…] “Al sol de Prestatyn” es un poema de Phillip Larkin donde se describe un cartel que encontramos al paso en una carretera.…
La alfabetización nos va a llevar a mundos que aún no son explorados para las personas que no exploran las…
Estos intelectualeeees... Ángel
Pues se agradece, Master, uno siempre echa en falta las buenas traducciones y, en especial, de estos monstruos de la…
Es una lástima que en este post tan bonito haya una traducción tan pobre... Para hacer justicia al poema y…
Propongo una explicación ( ) de este hermoso y potente texto, tanto para hacerle justicia como para hacer justicia a…
Magistral ndalfonso
Vamos, vamos, muchachos, que posiblemente ni siquiera habéis leído a Dante, ¿acaso pretendíais leer Miércoles de Ceniza de corrido, como…
Aprovecharé este poema para explicarme —a mí mismo sobre todo— algunos asuntos de la poesía y la poética que, estando…
Carlos para los poetas --y, en general, para los escritores-- introducirse en el mercado editorial es un auténtico drama, ya…
Me imaginaba los premios y el amaño detrás de cada uno, pero ahora confirmo mis sospechas. Qué desilusión. La verdad.…
Me parece un buen poema; antes, cuando entonces, hubiera dicho que necesito que un poema tenga imágenes concretas, imágenes reales,…
No quiero seguir hablando, gracias. NdAlfonso